Javier Carrasco Gil Participante Nº 11  Cuarto Clasificado del Primer Concurso de la FIAPBT; “Y TU, ¿QUÉ HACES EN DEFENSA Y CORRECTA PROMOCIÓN DE LA RAZA?  ¡¡¡FELICIDADES y muchas GRACIAS!!!

 

Javier Carrasco Gil Contestant No. 11  Fourth Ranked in the First FIAPBT Contest, "AND YOU, WHAT DO YOU DO IN DEFENCE AND RIGHT PROMOTION OF THE BREED?  CONGRATULATIONS and THANK YOU very much!!!

 

 

Hola, Sr. Don Mariano Peinado me pongo en contacto con usted, primero para darle las gracias por la labor que realiza en defensa de las razas injustamente discriminadas.

 

También por permitirme utilizar sus fotografías. En 2011 me puse en contacto con usted para solicitar permiso para ello, tengo que decirle que se repartieron 1000 copias entre la población Rondeña.

 

Aunque han pasado dos años, en los que he estado muy ocupado estudiando Etología con la AEPE (asociación para el estudio del perro y su entorno) le pido perdón por la tardanza y le envío el resultado. Si lo desea me manda una dirección postal y le envío el original en papel.

 

Un fuerte abrazo. 

 

Francisco Javier Carrasco Gil

Educación y adiestramiento canino.

educanis.over-blog.es - educanis55@gmail.com

 

Así quedó el trabajo que tuvo muy buena aceptación entre la población de Ronda (Málaga)

 

 Reverso y portada.

 

 

 

 

 

 

Un parque canino en nuestra ciudad

Por Francisco Javier Carrasco Gil

 

Introducción

La etología clínica trata de prevenir, diagnósticar y tratar los problemas de conducta.

A través de este texto trato de dar información para prevenir problemas conductuales. Ofrecer datos

precisos a nuestros dirigentes en los ayuntamientos de por qué es beneficioso un parque canino. Y pedir

que tengan en cuenta a estos fantásticos animales que nos acompañan, acompañaron y ayudaron a

nuestros ancestros desde hace más de quince mil años.

Miles de perros son abandonados o sacrificados por problemas de comportamiento cada año y muchos

se pueden prevenir y tratar de forma muy favorable.

Desde la etología clínica atendemos problemas considerados de salud pública, (cuando cuentan con

nosotros) como los trastornos relacionados con agresión a humanos. Aislar a un perro y poner trabas a

su socialización es la forma de hacerlo antisocial y últimamente estamos prohibiendo, prohibiendo y

prohibiendo, como si eso fuese la solución para evitar casos de agresividad. No es esa la solución.

Sabemos que muchos de los problemas de comportamiento son causados por falta de socialización y

manejo inadecuado, presentando conductas anormales por los sistemas sociales en que viven.

 

¿Por qué tener parques caninos?

Con los parques caninos se facilita la tenencia responsable, reducimos problemas de comportamiento

como el miedo, la agresividad y otros problemas derivados de no liberar energías. Así como problemas

de obesidad.

Un parque canino ofrece características especiales. Los perros interaccionan con personas a las cuales les

gustan los perros y es muy beneficioso para una socialización correcta con humanos.

Los propietarios de perros que son muchos en cualquier ciudad, pueden contar con un lugar de expansión

donde poder socializar a sus mascotas con miembros de su misma especie y con humanos (necesario para

tener un perro equilibrado psíquicamente en un mundo humano). Además de un punto de encuentro donde

poder compartir experiencias y anécdotas.

 

Ese lugar de encuentro es ideal para informar sobre la tenencia responsable, la educación, la salud,

concienciar sobre los abandonos, el bienestar animal...

Las personas que no poseen perros obtienen el beneficio de minimizar encontrarse perros sueltos por la

calle y parques destinados a las personas, descenso de defecaciones en las aceras y aumentar su

seguridad. Ya que los perros de nuestra ciudad aumentarán su sociabilidad.

Redundará en dueños de perros más responsables con la consecuente reducción de los problemas

higiénico sanitarios. “Aunque siempre existirán individuos mal educados que no recogen las deposiciones

hasta que los pillen. Y el que le abre la puerta para que el perro salga solo a hacer sus necesidades

fisiológicas”. Estos individuos hacen daño a toda la comunidad y ahí entran también los dueños

responsables y educados.

 

Las actuales leyes sobre tenencia de animales, propician que los perros sean menos

sociales. Y con ello interfiere aumentando conductas consideradas anormales y la

agresión hacia perros y personas.

 

Interfiere evitando interactuar libremente con gran variedad de perros y humanos.

Un perro al que privamos de que se relacione con perros y humanos extraños, estamos creando un animal

antisocial y con ello miedoso o agresivo. La causa es que se enfrenta a estímulos a los que no está

habituado y su organismo reacciona de forma intensa, actuando de la única manera que sabe para asegurar

su supervivencia.

Dejarlo libre de ataduras interactuando con gran variedad de perros y humanos, hace que aprenda a ser

un animal social. Ser social no viene incluido en su genotipo (no es innato) pero sí, vienen pre

programados a través de la selección natural los mecanismos que le permiten aprenderlo. De esta forma

hacemos que acepte de buen grado a otros miembros de su especie así como a humanos conocidos o

extraños, no interpretándolos como una amenaza.

Los perros que interactúan libres de ataduras desarrollan estrategias que evitan la agresión con sus

congéneres.

En animales preparados genéticamente para usar la agresividad y que además son gregarios (viven en

grupo) la selección natural los a provisto de mecanismos que impidan en lo posible la agresión.

Estrategias que tienen que aprender a usar correctamente en sus interacciones con los demás. “Sería

absurdo luchar, siempre que podamos saber a priori el resultado final de la disputa mediante señales

ritualizadas”. Osea que si se puede conocer anticipadamente el resultado final mediante señales, no es

necesario llegar al gasto que entraña la agresión. De esta forma la relación entre costos y beneficios

inclina la balanza hacia los beneficios. Ahorrando energía y evitando heridas o contusiones, preservando

su supervivencia. Estas señales las tienen que practicar sin ataduras para aprender a comunicarse

correctamente, dando paso a estrategias de superioridad o inferioridad, en detrimento de agresividad o

miedo.

 

No poder soltarlos aumenta el desarrollo de estereotipias (patrón de conductas repetitivas sin una

función aparente)

Las estereotipias normalmente suceden por ambientes pobres en estímulos, estar sueltos en una zona de

esparcimiento con otros perros y humanos ofrece estimulación muy beneficiosa.

 

Interfiere en la descarga de energías.

Un perro que sale siempre atado no descarga correctamente.

Un perro necesita actividad, algunas razas más que otras. Pero todos necesitan correr, buscar, perseguir,

atrapar aunque sea una cuerda o una pelota. Todo esto son conductas relacionadas con su especie para la

obtención de recurso, mediante la conducta compleja de caza.

Ellos necesitan llevar a cabo estas conductas y si no lo hacen se frustran, desembocando en

comportamientos no deseados. Además la frustración estresa y puede desembocar en problemas

orgánicos.

 

Propicia obesidad.

No soltar a un perro para que corra propicia obesidad. Contar con un lugar seguro para poder soltar a los

perros favorecerá que hagan ejercicio, previniendo la obesidad y las numerosas patologías asociadas que

implica.

Creo, que si ponemos leyes que nos obligan a llevar atados a los perros y además a algunos con bozal.

También tenemos la obligación moral de suministrar zonas de esparcimiento, que de alguna forma palíen

esta censura y minimizar la incidencia causada sobre el bienestar animal.

 

Francisco Javier Carrasco Gil

Máster teórico-práctico en etología canina, avalado por AEPE (asociación para el estudio del perro y su entorno)

Granada 2012-2013

Diplomado en psicología, educación y adiestramiento canino (centro para la cultura y el conocimiento)

Madrid 13-10-2011 número de registro 107416